¿Cuál es tu demoledora?


Tal cual nos hizo ver el señor Aznar, con un poco de trapicheos podías conseguir la casa que siempre habías deseado. Miles de hectáreas para edificar, todo el sector de la construcción e inmobiliario se volvió loco: dinero para todos, alegría aumentada, casas, casas y más casas. Nada parecía poder derrumbar esos enormes edificios construídos con la ilusión de poder vivir en un estatus al que no perteneces, porque sigo pensando, a pesar de lo que me diga una que yo me sé, que seguimos viviendo en una sociedad de clases divida por el nivel adquisitivo.
Gorosabel
Sin irme mucho del tema o un poco sí, así es como me he visto yo de unos meses atrás aquí, tampoco tan exagerado pero la historieta me ha venido bien. Imagínense: estudiar pero llendo a clase lo justo, trabajar en un sitio donde todo son facilidades aunque los pagos se te hacen con un retraso inimaginable, otro trabajo, si cabe más fácil, que te da unos eurillos más. ¿Qué haces tú? Felicidad. Empiezas a salir más de lo que debes, sin contarte demasiado, que una cena en La Barraca siempre está mu rica, ¿y un aperitivo? venga, pues también. Regalo aquí, regalo allá, ¿necesitas pasta? aquí estoy yo, con mi reducido pero agradecido sueldo que me da para todo, no hay problema. ¿En serio no hay problema?
Eso es lo que pensaban constructores, albañiles, inmobiliarias y demás, pero un buen día llegó la demoledora crisis que tiró y destrozó todos aquellos pisos que fácilmente ibas a vender, todos aquellos edificios aún por construir, todos...al suelo y sin presupuesto para recoger los pedacicos. Así me he quedado yo, adiós a uno de esos trabajos, me aportaba más disgustos que otra cosa, y continuamos con el otro pero pagos retrasados, deudas que salgar, y sí, allí está mi demoledora, la señora matrícula de la universidad, esperaba su llegada, sí que es verdad, pero no tan temprano. Así que aquí estoy, con los euros en las arcas de una institución que me hace desaprender más que aprender, y yo aquí, sin poder permitirme un señor aperitivo. ¡Qué mal repartido está el mundo, copón!

2 comentarios:

Ana Carrillo dijo...

pero pa unos litricos si que tenemos no??? pos eso es lo importante! jijiji

Sarlacc dijo...

Maldita sea la burbuja del aperitiveo, marineras para hoy pero hambre para mañana. Ya lo decía Zapatero, pedid la caña sin tapa, pero no le hicisteis caso. No, no se lo hicisteis.